Bucaramanga, 26 de mayo de 1828.
SEÑOR DOCTOR J. A. DE ÁLAMO.
Mi Querido Álamo:
Muchos días ha que no tengo el gusto de recibir ninguna carta de Vd., a pesar de que las deseo más que ninguna otra, porque los informes de Vd. son siempre exactos y bien calculados. Escríbame, pues siempre.
Los negocios de la convención van así, así. La federación se ha rechazado días ha, mas no por eso han hecho todo lo que deben hacer en bien de esta patria. Actualmente se ocupan de las reformas de la constitución que tardará algunos días todavía. Entre tanto yo permanezco aquí hasta ver la constitución que se presente al pueblo de Colombia, pues si ella no ofrece los medios de salvar la república o mantenerla en orden, prefiero abandonarla antes que comprometerme a su pérdida.
Vamos a otra cosa. Ansío mucho por saber si a Lara se le han pagado los dos mil pesos que yo le he librado. ¡Por Dios!, Álamo, vea Vd. modos de realizar esa libranza.
Memorias a los amigos y créame su afectísimo amigo.
BOLÍVAR.
Reciba Vd. mil expresiones de su afectísimo amigo.
A. ¡barra.
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