[Boletín del Ejército Libertador de Venezuela.]
Atrincherado el enemigo en la pequeña población interior, como dijimos en el último Boletín, no cesa de hacer un fuego inútil sobre los edificios del pueblo exterior, en que están guarecidas nuestras tropas .
A las cuatro y media de este día, se provocó al enemigo con una escaramuza que insensiblemente produjo un vivo tiroteo, no hubo la menor desgracia por nuestra parte, causando muchas en los contrarios, según informes dados por dos hombres que acaban de pasarse.
El Presbítero D. Salvador García [1] ha sido enviado cerca de Monteverde para tratar de un canje de prisioneros; con efecto se ha aceptado, y se discute el modo de verificarlo.
Se construyen trincheras para resguardar nuestra infantería, y poder ofender desde ellas al enemigo.
La artillería llegará mañana, y se formarán baterías que hagan alejar los buques de guerra que incomodan con sus fuegos nuestras divisiones, aunque con poca, o ninguna, ventaja.
Se acaban de desclavar los cañones de las vigías, y se activa la composición del cureñaje, que estará listo en todo el día de mañana; los tiros de estas fortalezas dañarán mucho los buques de la bahía y los harán huir de ella, destruirán las casas del pueblo interior, donde apenas podrán parar un instante los enemigos, cuando tengan que sufrir un fuego continuado de gruesa artillería.
Cuartel General de Puerto Cabello, 28 de agosto de 1813, tercero y primero.
RAFAEL DE URDANETA.
* De un impreso de época coetánea. En la Gaceta de Caracas, N° II, correspondiente al jueves 2 de septiembre de 1813 se incluyó este documento con el título de "Otro Boletín". Probablemente se publicaría también en hoja suelta aunque no ha llegado a conocimiento de la Comisión Editora, quien tampoco ha podido examinar el original. Sobre el firmante, véase lo dicho en las notas principales de documentos precedentes.
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