Popayán, enero 27 de 1822.
Al Comandante Rengifo Palacio.
Dispone S.E. el Libertador que todos los ganados que han de remitirse del Valle a esta ciudad vengan bien cuidados, escoltados y conducidos por vaqueros, de modo que no pueda perderse ni una sola res en el camino: que Vd. haga cargo de cada partida de ganado a un caporal formal el cual debe entregar a Vd. un recibo de la cantidad de reses de que se hace cargo para conducir aquí y a mi vuelta debe darle el recibo de haberlas entregado en esta ciudad pues S.E. con esta fecha previene al Intendente del Cauca que el caporal que perdiere ganado sea pasado por las armas. También quiere S.E. que las partidas de ganado marchen todos los días sin hacer largas jornadas pero sin dejar de caminar ni un solo día: que Vd. acelere y abrevie la marcha de todos los ganados que deben venir a esta ciudad pues S.E. en su tránsito de los Valles a esta ciudad no ha visto en marcha ni una sola res y esta era la hora en que ya debían estar empotrerados los ganados para que se repongan y descansen. También quiere el Libertador que Vd. recoja todos los vaqueros necesarios y pida los más que necesite al Intendente del Cauca para que los ganados vengan bien cuidados y no se pierdan por falta de peones; en fin S.E. quiere que con la mayor brevedad vengan todos los ganados que se han pedido, pero sin hacer largas jornadas, pero también sin dejar de marchar ni un solo día y hace a Vd. responsable con su vida de la menor falta en el cumplimiento de esta orden.
Dios guarde, &.
[JOSÉ GABRIEL PÉREZ]
* De un copiador del Archivo del Libertador. Sección O’Leary, tomo XIX, folios 115 vto. al 116.
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