Llanogrande, enero 14 de 1822, 12º.
Al Señor Gobernador de Neiva, Coronel Caicedo.
Hoy ha recibido S.E. el Libertador Presidente el oficio de V.S. de 28 de diciembre; diez y ocho días ha gastado esta comunicación para llegar de Neiva aquí. Si como es de poca importancia, fuera de una grande, habría venido en el mismo tiempo y quizás se habría seguido un grave mal. S.E. cuando previno a V.S. el establecimiento de postas, ha tenido por objeto hacer que las comunicaciones vayan seguras y que marchan con la mayor rapidez. Hasta hoy no se ha conseguido, no obstante las razones que se le presentaron a V.S. desde el Pedregal. S.E. reitera y previene a V.S. la completa y perfecta organización de postas desde Caloto hasta Tocaima haciendo a V.S. responsable de los defectos a que quede expuesta la comunicación con el Gobierno, y de este con S.E. el Libertador. A la falta de postas, a los retardos, dilaciones y descuidos de los conductores, atribuye el Libertador la ignorancia absolua en que se halla de Bogotá, de donde no tiene noticias desde su tránsito por Tocaima, extrañando mucho el Libertador que la comunicación de V.S. de 28, guarde el más profundo silencio sobre la Guardia, sus marchas, lugar donde se halle, o cualquiera otra noticia relativa a ella, que sabe V.S. son las interesantes al Libertador, no menos que lo que V.S. supiera de Bogotá.
Además reitera S.E. que se apliquen castigos fuertes de azotes, a los postillones que cometan faltas, retardos o demoras en la conducción de las correspondencias, pues sin esto, serán inútiles todas las demás medidas.
Todo lo participo a V.S. de orden de S.E. Dios guarde a V.S. muchos años.
[JOSÉ GABRIEL PÉREZ]
* De un copiador del Archivo del Libertador. Sección O’Leary, tomo XIX, folio 110 y vto.
RSS 2.0