Cuzco, 24 de julio de 1825.
Al Señor Presiente de la Corte Superior de Justicia de Arequipa.
S.E. el Libertador desea que esa Corte Superior de Justicia reciba toda la organización posible a efecto de proporcionar [1] su más arreglado despacho. A este fin ordena que V.S. exija los despachos de los escribanos y procuradores que existan en esa ciudad y en todo el departamento: que con vista de ellos informe V.S. sobre las aptitudes e integridad de cada uno y sobre la legitimidad de sus títulos: que asimismo proponga V.S. los que deban ser nombrados escribanos del Estado, de diligencias y públicos que previene el reglamento de tribunales, ciñéndolos al número regular que demanden las atenciones del despacho en servicio del público: por último, que proponga V.S. los porteros y demás empleados que por ordenanza debe tener ese tribunal.
Como la administración de justicia en cada una de las capitales de provincia, sea conforme a la constitución de la República, y a los deseos que animan a S.E. por el alivio de los pueblos en esta parte de la administración pública; quiere que se propongan también, de acuerdo con el señor prefecto del departamento, los abogados que deban servir las judicaturas de derecho y los medios más adecuados a la provisión de sus rentas y menos gravosos al tesoro público.
Soy, etc.
[FELIPE S. ESTENÓS]
* De un copiador de Secretaría. Archivo del Libertador, Sección O’Leary, tomo 39, folio 65 Vto.
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