Al General en Jefe del Ejército de Oriente.
En la Gaceta de Caracas, número 10, que tengo el honor de incluir a VS., se servirá leer el artículo concerniente al acta de la Municipalidad del Distrito aclamándome Libertador de Venezuela y General en Jefe de sus Ejércitos [1]. Sin embargo de considerarme sin méritos para esta remuneración y de reconocer la incompetencia de la Municipalidad para conferírmela, la he aceptado, por ser voto de mi patria y por prestarme a las instrucciones de los pueblos. La gratitud, o por mejor decir, la veneración con que debo recibir este testimonio de la voluntad de mis conciudadanos, me obligan a que acordándole toda mi consideración, ponga así mismo en noticia de VS. para que se sirva concederle la suya, según es debido a los deseos de estos beneméritos pueblos.
En Caracas instituí la Orden militar de los Libertadores [2], y la ley de institución tendré el honor de dirigirla a VS. luego que salgan de las prensas los primeros ejemplares. Son de esta Orden todos aquéllos, principalmente los de la Nueva Granada, que por sus esfuerzos heroicos han contribuido al restablecimiento de la República, y es el objeto de ella tributarles una justa distinción, debida a su extraordinario valor y a sus grandes servicios hechos a la liberalidad, para excitar a los demás a seguir sobre sus huellas el camino de las sendas del honor.
Remito a VS. algunas de estas veneras para que se sirva distribuirlas entre aquellos jefes más ilustres que bajo las órdenes de VS. han plantado en el Oriente oprimido el árbol de la libertad. Yo mismo la llevo, pues aunque en la feliz empresa que han terminado con gloria nuestras armas, soy el ínfimo en mérito, sin embargo, el honor que he tenido de conducir los Ejércitos libertadores, junto con mis sentimientos incontrastables por la libertad de la patria, de que puedo responder, me obligan a no desdecir la divisa del Ejército que está a mis órdenes. Suplico, por lo tanto, a VS. se sirva usar la misma venera, que la gloria de haber libertado su patria del yugo español, pone imperiosamente sobre su intrépido pecho que expuso al sacrificio en el campo por la libertad venezolana.
Dios, etc.
Valencia, Noviembre 4 de 1813.
SIMÓN BOLÍVAR.
* De un impreso moderno. O’Leary, Memorias, correspondencia oficial, pp. 405-406, da el texto de este documento que dice haber tomado "del Copiador de la Secretaría". La Comisión Editora no ha podido examinar ni dicha copia ni el original. Sobre el destinatario, véanse la nota 3 del doc. N° 143 y la nota principal del doc. N° 253, en la correspondencia oficial de esta Colección.
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