Apuntes que se dan en las circunstancias políticas que se agravan sobre el Perú, con conocimiento de la fuerza y recursos de los enemigos, situación que ocupan las fuerzas aliadas en el territorio libre, medios a que se deben apelar y arbitrios que se pueden tocar como precisos para el sostén y organización de seis mil hombres de que se formará la columna peruana.
1°- No se puede pensar en cosa alguna sin un fondo disponible de doscientos mil pesos, éste se deberá colectar y manejarse por una mano diestra y de probidad de las que no faltan cuando se buscan, que esté a las inmediatas órdenes del Señor General en Jefe, y sin que tenga otro destino que el equipo de las tropas. Su extracción merece la más meditada consideración; pues si se oprime a los pueblos ya extenuados se acaba de afligir al necesitado: de consiguiente sólo debe salir de los pudientes, como que poco importa que se quejen un limitado número de vivientes, cuando no se enferman todos los demás que constituyen las sociedades: Esto deberá allanar una junta de muy corto número de hombres no intrigantes, de fortaleza y de conocimientos en el País, para que hagan la distribución con arreglo a los fondos, obligaciones y servicios; la que se realizará sin excusa y hasta con ejecución de la vida al que sea egoísta, y no quiera convencerse, de que no puede haber libertad sin sacrificios.
2°.- Se tratará de que todas las rentas del departamento de Trujillo, no salgan de su círculo, sirviendo mensualmente para el sagrado pago del soldado, sin pensarse en abonos de deudas atrasadas por privilegiadas que sean: reduciendo los gastos y salidas, con proporción a lo que entre y deba darse. Se darán creces a estas Rentas con medios generales que buscan suavemente y sin echarse al olvido los dos puntos siguientes:
Los curatos se pueden dividir en tres clases, y éstas sufragar con 50 pesos mensuales cada párroco de la primera: 35 pesos los de la segunda, y 15 los de la tercera: en la inteligencia que todos los pueden hacer así; y el que no quiera contribuir que deje el destino, y lo ocupe otro virtuoso patriota.
Que la plata pina tenga el destino que quiera el propietario, tanto para guardarla o girarla, cuanto para darle exportación al extranjero, con tal que religiosamente y con penas que se impongan, pague al Estado seis y medio reales en marco por único derecho: parece que presenta perjuicio, pero no es así, si se está al clandestino comercio que sabe hay el que hable, ya sea por las ventajas que soporta el que lo hace, o bien por la desconfianza con que gira a mérito de no haber casa de moneda expedita, y que el mismo Estado la tome para satisfacer en mejor oportunidad; lo que debe versarse con la pureza y seguridad que requiere la fe pública, verdadero y único manantial de las prosperidades de todo Gobierno.
3°-. Las provincias del departamento de Trujillo son las que se siguen y capaces de subvenir con los artículos que se dirán, muy necesarios todos para la existencia del soldado, formándose también un depósito administrado por diestra mano.
La de Lambayeque, con jabones, cordobanes, pieles de lobo, arroces y alguna harina.
La de Piura, con jabones, algunos cordobanes, ganado vacuno y mulas.
La de Trujillo, con arroces, harinas y algunas menestras, sin olvidarse de azúcares y chancacas que la misma diestra mano lo reduce a dinero, y sirve para llenar el vacío que presente la falta de otros renglones, como son suelas y pitas, que vienen de Guayaquil La de Cajamarca, tributándole la de Chota, Jaén, Chachapoyas, y Moyabamba [1] de las que las tres últimas son Provincias de pocos recursos, con la ayuda de Huamachuco puede y debe sostener la manutención de la columna del Perú; surtiéndola de algún equipo de ropa de abrigo, por sus manufacturas de algodón y lana.
La de Patas, con parte de alguna ayuda de la dicha de Huamachuco, no tiene inconveniente en concurrir con ganados a la costa, u otro punto que se designe.
4°-. La conscripción es muy buena y de su caso, cuando no se está en la precisión de cerrarse las puertas para defenderse del enemigo que está encima: en tales circunstancias la conmoción debe ser general; y así pues, forzoso realizar en un día lo que se ha de practicar por trámites, y continuos suspiros en los pueblos.
No se oculta que estos pensamientos al alcance de todo hombre político y que sin duda se la habrán puesto en ejecución; pero no puede prescindir de apuntarlos el que es reconocido a su país: que aspira por el acierto de un sujeto honrado, que se ha puesto a la cabeza del ejército en críticas circunstancias: que en confianza le presenta su idea, y lo compromete a que jamás lo descubra, porque se creería trata de hacer mérito para mejorar de fortuna y ponerse a cubierto de bajas acusaciones, cuya triste consideración es diametralmente opuesta a su modo de pensar; y por último que quiere ser libre, bien desengañado de que no se consigue en el orden que se ha llevado hasta aquí; esto es proporcionándose entradas, y siendo muy malas las salidas, por la poca o ninguna delicadeza de personas ambiciosas a fortuna, y bien distantes de la prosperidad de la causa de América.
Hoy 3 de marzo de 1824.
* Del original. Archivo del Libertador, Sección O’Leary, Tomo 36, folios 156 recto y vuelto. El documento carece de firma. Al parecer es una hoja de trabajo de la Secretaría del cuartel general del Libertador.
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