1814.
Traducción de la Gaceta de Jamaica Courant de 5 de enero de 1815, trasladado del "Mensajero de Cartagena", número 34, septiembre 30 de 1814.
Llegada de los generales Bolívar y Mariño a Cartagena con una exposición de las causas que les obligaron a abandonar a Venezuela y buscar un asilo en la Nueva Granada.
Después que el ejército de la República de Venezuela a las órdenes de estos dos jefes sufrió en el sitio de la Puerta el 15 de junio último la casual derrota que hizo dueños de los (...)
Excmo. señor Presidente del Congreso de la Nueva Granada, Encargado del Supremo Poder Ejecutivo de la Unión.
Excmo. señor: La naturaleza de una guerra de exterminio que me fue forzoso sostener en Venezuela, para conservar la libertad que la había dado, redujo aquel país a tal desolación, que es imposible describir a V.E. Aunque la fortuna constantemente coronó nuestros esfuerzos, decidiendo en favor de la República más de 100 combates, fue bastante una sola desgracia, experimentada en La Puerta el (...)
Ciudadano Juan Nepomuceno Ribas.
El ciudadano Antonio Fernández de León habiendo representado a S. E. que el progreso de sus males físicos le imposibilitaba continuar en el desempeño de la Dirección General de Rentas Nacionales, S. E. se sirvió admitir su renuncia, por decreto de este día.
Ha considerado detenidamente el General en Jefe los fundamentos en que apoya V.S. su repugnancia a admitir la Dirección General para que le ha nombrado, y hallando que el interés público es más poderoso que (...)
Al Señor Doctor Vicente Tejera.
Amigo y compañero mío:
Con el debido oficio ha recibido Vd. la venera de la Orden de Libertadores. Desde Cartagena hasta Caracas ha venido Vd. conmigo, consejero sereno y admirable, arrostrando las penas y desigualdades de una campaña lisonjera por los resultados, pero dura y cruel por la contribución de sufrimientos a que fuimos obligados los que tuvimos y tenemos el honor de formar en las listas del Ejército Expedicionario. Ella brillará sobre su corazón, mas (...)
Ciudadanos:
El odio a la tiranía me alejó de Venezuela, cuando vi mi patria segunda vez encadenada; y desde los confines lejanos del Magdalena el amor a la libertad me ha conducido a ella, venciendo cuantos obstáculos se oponían a la marcha que me encaminaba a redimir a mi país de los horrores y vejaciones de los españoles. Mis huestes seguidas por el triunfo, lo han ocupado todo, y han destruido el coloso enemigo. Vuestras cadenas han pasado a vuestros opresores; y la sangre española que riñe (...)