Pajarito, 14 de mayo de 1820.
Al señor Coronel Ambrosio Plaza.
He recibido el oficio de US. fecha del 13, incluyéndome la correspondencia venida de Apure; por ella ha sido impuesto S.E. de que el General Urdaneta ha salido de Achaguas el 2 del corriente, con cerca de 3.000 fusiles y 1.000 hombres de tropa; probablemente habrá entrado o estará muy inmediato a la montaña.
S.E. ha aprobado que se destine a Capacho el escuadrón del Comandante Carvajal, conforme me lo ha consultado US. y su Jefe de Estado Mayor en oficio de 12 del corriente.
En vista del informe que US. hace de la pérdida del ganado que conducía el Capitán Machado, quiere S.E. que averiguada que sea la venta hecha por él, se le aplique la pena de muerte a que están condenados todos los ladrones de los intereses del Estado. Además publicará US. un bando a nombre de S.E., imponiendo esta pena de muerte a todo el que en adelante cometiere igual crimen,especialmente de ganado. US. sabe que nada es más importante que proveernos de subsistencia; el ganado empotrerado no basta para un mes; así por ningún motivo se suspenderá la remisión de los peones que lo traen. S.E. dispone que no haya gasto reservado para este objeto y el de compra de ganados de particulares. De cualquier modo que sea, se pagarán los peones, aunque se emplee para esto el dinero con que se socorre la tropa, porque más vale tener raciones que dinero. S.E. ha determinado que el batallón Rifles marche a una expedición lejana, y me manda diga a US. que debe estar en el Rosario aquel batallón el 19 del corriente, lo más tarde, armado perfectamente, equipado como para una dilatada marcha, municionados con cuantos paquetes puedan traer sus cartucheras y con cuatro piedras de reserva.
US. arreglará su movimiento de manera que venga lentamente para que no se estropee la tropa. S.E. ha aprobado la providencia de US. para que vuelva a venderse aguardiente por cuenta del Estado. La marcha de los Rifles será en el caso de que no haya novedad del enemigo, pero habiéndola debe suspenderse, por lo menos hasta que se sepa la aproximación del General Urdaneta. Como dicho señor trae armamento nuevo para la Guardia, quiere S.E. que los Rifles tomen los mejores fusiles que haya en todos esos batallones y sobre todo, que se den las bayonetas, para que no venga un soldado sin ellas; procurará US. que todos los fusiles que se le den, sean ingleses, así por su buena calidad como por la igualdad de calibre.
Dios, etc.
PEDRO BRICEÑO MÉNDEZ
* De un impreso moderno, O’Leary, "Memorias", tomo XVII, págs. 175-176.
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