Al señor General Juan D’Evereux.
Luego que esté Maracaibo ocupado por nuestras tropas, marchará US. con la poca tropa que hoy se halla a las órdenes del Coronel Montilla, y pertenecía a la Legión Irlandesa de su mando, a aquella plaza, y seguidamente a mi Cuartel General, donde quiera que esté, lo que será muy fácil ejecutar por el Lago de Maracaibo. Por el Magdalena no puede hacerse, porque no llegará un hombre sano; pues las mismas tropas del país perecen, y por tierra las caminos son tan largos como difíciles e intransitables, para los que no están acostumbrados a ellos. Así, consultando la salud y la vida de las tropas del mando de US., he adoptado esta medida como la única que puede convenirle.
El Almirante y el Comandante General Montilla tienen la orden de dar a US. los medios de transporte.
Dios, etc.
Turbaco, agosto 28 de 1820.—10°.
BOLÍVAR
* De un impreso moderno. O’Leary, "Memorias"; tomo XVII, págs. 399-400.