Al Señor Ministro Plenipotenciario de Colombia en Méjico.
Tengo el honor de incluir a US. copia de la convención preliminar celebrada entre el Gobierno de Buenos Aires y los comisionados de S.M.C. y de la ley de 19 de junio y de la del 4 de julio dadas en aquel Estado.
También incluyo los nombramientos hechos de los comisionados que deben comunicar y ejecutar esta convención en las Provincias Unidas de La Plata que demarcan sus comisiones.
Con respecto a Chile, el Perú y Colombia, se ha nombrado un Plenipotenciario que invite a estos Gobiernos a entrar en el tratado el cual ha llegado a Chile, y se espera de un momento a otro en esta capital.
Quizá este Ministro dará una idea más clara de la negociación y manifestará la latitud de los poderes de los comisionados españoles, que serían muy necios si aun consintieran en proposiciones cuya base no sea la independencia; pues esto no sería sino pedir que se les repitiera la negativa que han oído cuando han propuesto otro género de avenimiento. Es de esperarse que en el conflicto en que se halla el Gobierno constitucional de España y en el estado de solidez y firmeza que han tomado los independientes, sea más justa la negociación que haya encargado a sus comisionados en América. El Libertador calcula que, aunque no hayan dado publicidad a la base de su negociación, ésta debe ser la independencia. De otro modo, Buenos Aires no perdería el tiempo ni en admitir proposiciones de otra clase ni en proponerlas a los demás Estados.
El proyecto de federación propuesto por el Libertador a los Estados de América, ha sido ajustado en toda su extensión con la República peruana, y su Congreso se ocupa actualmente de su discusión para ratificarlo. Se asegura que lo será en todas sus partes. La República de Chile lo ha aceptado también con una ligera modificación de algunos artículos no esenciales, y hay esperanzas de que sea ratificado por su Congreso, que está ahora ocupado de él. Esta liga nos dará un grado de poder que hará más liberales a los españoles y dará a los Gabinetes europeos una mejor idea del acuerdo de estos Gobiernos y de la estabilidad que van tomando cada día.
Mucho desearía el Libertador que la República de Méjico entrase en este pacto americano y que US., según su misión, hubiera sido el Agente de un tratado que hace de la América un pueblo de Naciones ligadas estrechamente en paz y guerra.
El Libertador desea que US. manifieste a la República mejicana su verdadera complacencia por la regeneración de su sistema y por el noble entusiasmo con que continúa marchando por el camino de la libertad.
Dios, etc. Lima, octubre 6 de 1823.
J. GABRIEL PÉREZ
* De un impreso moderno. O’Leary, "Memorias"; tomo XX, págs. 418, 419.
RSS 2.0