Lima, 4 de octubre de 1823.
Al Señor General Bartolomé Salom.
Incluyo a V.S. copia de dos oficios y una carta particular del General Sucre, recibidas anoche por un buque expreso destinado de Arica. También incluyo copia de una carta del General Santa Cruz al General Sucre y de un parte del Gobernador de Pacajes [1]] al mismo General.
Estas copias dan una idea de la posición, fuerza, operaciones y designios de los ejércitos libertador y realista en el Sur; y la dan también de los resultados favorables o adversos que pueden ser la consecuencia del estado actual de cosas por aquella parte. S.E. el Libertador, que quiere siempre tomar anticipadamente todas las medidas antes que la urgencia obligue a obrar con precipitación, me manda comunicarlas a V.S. volando, para que impuesto de ellas y del riesgo que debe amenazar a nuestro Sur, si como puede suceder muy bien triunfan los españoles, proceda V.S. a tomar las más activas medidas para tenerlo todo dispuesto para el caso que se teme, y ordena a V.S. lo siguiente:
1º Que se traslade a Guayaquil a enviar los buques y cuanto sea necesario para que los [tropas que se debían venir del Istmo, vengan en efecto a Guayaquil a la mayor brevedad] [2]] 3.000 hombres que el Poder Ejecutivo ha dispuesto vengan al Sur por el Istmo, se embarquen en ellos y vengan a desembarcar directamente en la Provincia de Trujillo en [Huanchaco] [3]] los puertos de aquella ciudad y de Lambayeque. [4]]
2º Que si V.S. necesitare de una parte de estos 3.000 hombres para cubrir a Quito o a Pasto o algún punto en que V.S. crea que se necesita de fuerza, dé V.S. la orden para que la parte que V.S. necesite vaya del Istmo a Guayaquil y toda la demás venga directamente del Istmo a la Provincia de Trujillo.
3º Que V.S. haga aumentar y poner bajo buen pie las guarniciones de Quito, Pasto y Guayaquil, tomando para esto todas las medidas que sean necesarias. Que V.S. haga tener bajo el mejor pie [las caballerías y hacerse que se tengan] [5]] los caballos con el mayor cuidado y esmero.
4º Que luego que el General Córdova llegue a los Departamentos del mando de V.S., le dé orden de venir al Cuartel General de S.E. y que le escriba para que venga, si no ha llegado. Que el General Barreto [6]] sea destinado a mandar los cuerpos de Quito o de Pasto, según lo exijan las circunstancias. Que si fuera necesario, destine V.S. al General Castillo a Quito o a donde V.S. lo estime necesario; en fin, que V.S. destine a estos dos generales y a cuantos Jefes estén en esos Departamentos, como V.S. crea conveniente y como sea más útil: que V.S. permanezca en Guayaquil, que por ahora será el centro de todas las órdenes y disposiciones de S.E. y donde se necesita un Jefe extraordinariamente activo, a menos que una circunstancia muy urgente llame a V.S. a otra parte.
5º Que V.S., como el responsable de la seguridad del Sur, vele sobre él, y sobre todo se ocupe seriamente de las guarniciones, de su aumento, disciplina e instrucción para que estén en el mejor pie posible.
6º Que V.S. remita la adjunta comunicación al Intendente del Istmo; pues en ella se le piden 2.000 fusiles, siempre que pueda desprenderse de ellos sin una falta para aquellas plazas. V.S. sabe cuanto se necesita de este artículo. Si el Intendente remite cualquier número de fusiles V.S. debe enviarlos a Trujillo o al Callao.
[Me apresuro a comunicar a V.S. estas noticias para su] [7]].
7º Antes he dicho a V.S. que el Ex-presidente Riva-Agüero está en guerra abierta contra el gobierno legítimo de esta República. Nuevos comisionados se han dirigido a él, y S.E. está resuelto a si continúa en su obstinación, hacerlo entrar por la fuerza en su deber. En este último caso marcharán de esta capital a someterlo o a batirlo. Dentro de quince días se sabrá el partido que se toma, y su determinación será lo que resolverá el Libertador. De todos modos, dentro de quince días o se emprenderá sobre Trujillo, o estará sometido: pero mientras V.S. no sepa de oficio que se ha sometido, tendrá la mayor vigilancia con los territorios limítrofes para impedir cualquiera tentativa de este disidente en que está no sólo hostilizando a su patria, sino tratando hostilmente, en cierto modo, a Colombia, interceptando y deteniendo la correspondencia que viene de allá y deteniendo los buques que proceden de nuestros puertos, como lo ha hecho con el transporte Sofía, que aún no ha llegado aquí.
8º V.S. en las circunstancias actuales, debe tomar un doble interés en cobrar el empréstito mensual decretado en Quito por el Libertador, para con él ocurrir a los gastos urgentes y cubrir las letras que gire el Libertador contra esas cajas de Guayaquil.
Luego que V.S. se haya impuesto de las copias que incluyo, las dirigirá con expreso al Poder Ejecutivo, y con copia de esta nota para que nuestro Gobierno se imponga de la situación de los ejércitos en el Alto Perú y de las órdenes que el Libertador, comunica a V.S. en consecuencia.
Dios, etc.
[JOSÉ GABRIEL PÉREZ]
* De un copiador del Archivo del Libertador. Sección O’Leary. Tomo XX. Segunda parte. Folio 73 al 74 y vuelto.
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