Rosario, febrero 11 de 1820.
Señor Gobernador de Tunja.
Señor Gobernador:
He dispuesto que marche el señor Grávete [1] a esa Provincia, a servir de Mayor de un cuerpo que se debe formar en ella para su guarnición; estando entendido, que dicho cuerpo no se tocará para otro servicio que para el de la Provincia o la Nueva Granada; de ningún modo irá a Venezuela, bajo la protesta más solemne, y así lo hará U. entender, y lo ofrecerá de mi parte a los individuos que entren a él. U. tomará el mando de este cuerpo y será el Comandante efectivo de él. Yo le mandaré fusiles inmediatamente, y U. tomará todas las demás disposiciones para que se equipe y discipline. Ningún recluta vendrá más al ejército, ni irá más a Venezuela, excepto los que deserten del batallón de Tunja. Todo esto lo hará U. publicar por bando en la Provincia, y lo hará ejecutar rigurosamente.
Tome U. el mayor interés en que la División del General Valdés no carezca de víveres, y en que haya todos los bagajes y demás que sea necesario para conducir el parque que viene para la Salina, y debe traer los fusiles para armar su batallón, y las municiones para defender la Nueva Granada, pues es una de las cosas más interesantes en las circunstancias presentes, y así no excusará U. medida ninguna a fin de que este parque no tenga la más pequeña dilación ni retardo.
Dios, etc.
BOLÍVAR
* De un impreso moderno, O’Leary, "Memorias", tomo XVII, página 66.