Al señor Coronel Jacinto Lara.
Por el Estado Mayor General fue US. informado ayer de una proposición hecha por el enemigo, pidiendo un mes de suspensión de hostilidades, para entrar en las negociaciones de la paz. S.E. vino a este Cuartel a conferenciar con el emisario, y oído lo que éste le expuso, ha contestado aceptando el armisticio, solamente con respecto a este ejército; pero de ningún modo en cuanto a las operaciones de los demás ejércitos o divisiones de la República.
En consecuencia, me ordena S.E. que haciendo saber a US. esta ocurrencia, le recomiende el cumplimiento de la orden librada ayer por el Estado Mayor General, relativamente a la continuación de sus operaciones. Pero como probablemente la negociación seguirá y tendrá un resultado tanto mejor y ventajoso cuanto más fuertes y superiores seamos al enemigo, S.E. encarece a US. la necesidad de que conduzca, dirija y ejecute sus operaciones con la más grande prudencia y circunspección, para no comprometer la división de su mando a una función de guerra que pueda sernos desfavorable ni dar al enemigo la menor ventaja o superioridad. A este fin importa sobremanera que sepa US. las siguientes noticias recibidas por un conducto seguro.
La columna de Cazadores del Tambo que tenía La Torre, marchó en efecto para Maracaibo y debe estar allí. US. sabe que su fuerza no baja de 300 hombres. El señor Coronel Montilla se reembarcó en Río Hacha el 5 de junio. Es verdad que obtuvo un suceso completo sobre una columna del cuerpo de Lima [1] que se había avanzado hasta Laguna Salada; pero habiendo perseguido a los derrotados, dio con el grueso del ejército y no creyéndose capaz de batirlo se retiró y ejecutó el reembarco.
Lima ocupó a Río Hacha, y entretanto Montilla hizo otro desembarco al frente de las fortalezas enemigas de Santa Marta y bajo el tiro de cañón. Permaneció allí algunos días tiroteándose frecuentemante a fusil y cañón. Al fin tuvo que evacuar el país que ocupaba, se reembarcó, y según dice el Gobernador de Santa Marta, se dirigía a Sabanilla en la boca del Magdalena. No se sabe más de él. Es probable que esté divirtiendo al enemigo por la Costa, pero no puede calcularse si habrá preferido la de barlovento, o sotavento de Cartagena. Los habitantes del país, los espías y Comandante Maza, podrán informar a US. de esto con más seguridad.
El ejército de Sánchez Lima era fuerte de 1.400 hombres cuando obraba sobre Río Hacha.
He recibido todos los oficios de US. hasta la ocupación de Chiriguaná el 24. S.E. ha sido instruido de todo y da a US. las gracias por la conducta y acierto con que ha dirigido sus operaciones.
Dios, etc.
Rosario, julio 7 de 1820.
PEDRO BRICEÑO MÉNDEZ
Lo mismo se dijo al Comandante Maza.
* De un impreso moderno. O’Leary, "Memorias", tomo XVII, págs. 261-262.
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