Cuartel General de San Juan de Payara, enero 21 de 1820.
Al señor General José A. Páez.
Mando a US. 35 hombres con el Coronel Piñango [1], en reemplazo de otros tantos que lleva el señor Coronel Rangel, además de los 25 que debía tomar de los Cazadores.
El español galafate, que US. tiene en la isla, me conviene mucho para la construcción de buques en el Magdalena [2]. Mándemelo US. a mi Cuartel General, el deberá alcanzar la columna del Coronel Mires en Guasdualito y se le dará un buen caballo.
Por Salina [3] han pasado más de 1.600 hombres para este ejército, y más de 500 por San Camilo [4] de éstos se han desertado más de 800, y hay más de 400 enfermos por culpa de los Comandantes y comisionados para tener custodias y víveres. Nada se ha hecho en Guasdualito ni en Arauca de lo que yo he mandado, y voy a hacer uso del poder ilimitado que me ha concedido el Congreso, pasando por las armas a cuantos Oficiales y Jefes hayan tenido la culpa de este inmenso mal; y ordeno a US. que haga lo mismo con todos los que yo no tenga la fortuna de atender, tomando para este efecto todos los informes necesarios de los Jefes y Oficiales que han conducido estos reclutas.
Dios, etc.
BOLÍVAR
P.D. Mande US. una persona de su confianza, para que cuide los 275 hombres que hay en Guasdualito, recogiendo todos los víveres que haya para su mantención, pues estos son hombres que pueden ser muy útiles al ejército y yo dudo mucho que vengan más reinosos [5], según el mal tratamiento que hanrecibido aquí y en el tránsito, quedándose sin comer tres y cuatro días por la abominable conducta de los Jefes encargados de suministrarles víveres.
* De un impreso moderno, O’Leary, "Memorias", tomo XVII, páginas 43-44.