El Rosario, a 23 de junio de 1820.
A S.E. el General F. de P. Santander.
Albricias otra vez, mi querido general: Montilla ha triunfado, como Vd. verá, de las fuerzas de Santa Marta y Maracaibo reunidas cerca de Río Hacha. Tenemos detalles bastante circunstanciados de los movimientos de Montilla y de Lima. La mitad de la fuerza batida era de Maracaibo, según parece, por la declaración de un oficial presentado y de los otros derrotados. El que menos le da 2.000 hombres al enemigo, y era preciso que así fuera porque si no, no nos habrían buscado con tanto empeño. Parece que la acción ha sido bien mandada, pues ha habido en ella gran parte de sorpresa. Sin duda Montilla estará sobre Maracaibo o lo habrá tomado ya, pues nada le quedaba por hacer sino esta operación. Ya se ha dicho por los godos que estábamos en posesión de esta ciudad, y es cosa posible y aun debía ser necesaria, porque los prisioneros de Maracaibo deben haber aumentado las fuerzas de Montilla que, en mi concepto, ya no debían tener enemigos que batir por pocas que fuesen las tropas de Montilla.
Lara me escribe del Carmen el 18 encantado de las noticias y desesperado por llegar, como Vd. debe imaginar. Debemos contar ya con Maracaibo, si no hay desgracias impensadas que, en el día, no debemos ni aun temer.
Me parece que las fuerzas de Córdoba se aumenten con todas las que hay en Antioquia, porque los godos van a levantar un grande ejército en Cartagena, como el de Santa Marta y aun mejor. Estamos recibiendo fusiles y podremos mandar algunos a Antioquia para reemplazar la falta que haga la fuerza que de allí se saque.
Estoy desesperado por saber que se ha reunido el batallón de Honda con Maza. Para mandar este batallón nadie lo hará mejor que Maza interinamente. Estoy reconciliado con él pues nada he sabido contra él.
Pienso mandarle el grado de coronel a Córdoba, luego que haya obtenido algún suceso, para que mande en jefe todas las fuerzas del Cauca y Magdalena: me parece que lo ha de hacer muy bien, y me llevaré un gran chasco si este joven no sale un excelente oficial.
Ni por el Chocó, ni por Antioquia, ni por el Sur, se debe temer cosa ninguna. La fortuna y la victoria nos siguen de cerca.
Urdaneta marchó a la Grita, hace cuatro o cinco días, y aún no sé nada de él. Todavía no tengo noticia del dinero. Todavía no sé nada de oficio de Venezuela; y todavía no habrá Vd. recibido las medallas que le mandé con Silva. He visto la Gaceta con su medalla.
Adiós, mi querido general. Mande Vd. a su afmo. que lo es de corazón.
BOLÍVAR
* De un impreso moderno. Simón Bolívar, "Obras Completas", tomo I, págs. 459-460.
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