Rosario, junio 22 de 1820.
Al señor Coronel Antonio Paredes [1].
Por no haberse cumplido la orden que en 26 de mayo comuniqué a V.S. sobre la posta; y que se ofreciese a los hombres empleados en este servicio ocho pesos por cada correspondencia que traigan a San Cristóbal, se ha atrasado el servicio en una importantísima comunicación del señor General Soublette que ha llegado con 32 días de atraso; se repite la misma orden añadiendo que si la correspondencia que viniere es importante o urgente S.E. les aumentará la gratificación hasta 16 pesos siempre que vengan en los 6 días señalados. S.E. ha visto lo que dice V.S. del señor General Urdaneta sobre el parque. Si la pólvora no pudiere venir por las inundaciones, la detendrá V.S. hasta que se pueda enviar; pero que venga inmediatamente que no haya peligro evidente de perderse.
El Teniente Coronel graduado Alvarez tiene comisión para ir a buscar a esa villa las armas, municiones y demás efectos del parque que hay o llegue ahí. V.S. le prestará cuantos auxilios necesite en bestias, peones y todo lo demás que facilite y asegure la conducción. S.E. espera que no faltará nada, que no habrá detenciones, y que todo se traerá lo más pronto y del mejor modo posible.
Todo lo que pueda venir inmediatamente se enviará luego, pero especialmente los fusiles.
Dios guarde, etc.
PEDRO BRICEÑO MÉNDEZ
* Del copiador de la Secretaría. Archivo del Libertador, O’Leary, tomo XVII, folios 47 vto. al 48, 2a pane.
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