DOCUMENTO 2184. DEL ORIGINAL, O.C.B. CARTA DEL LIBERTADOR SIMÓN BOLÍVAR AL GENERAL MARIANO MONTILLA, FECHADA EN POPAYÁN EL 30 DE NOVIEMBRE DE 1829. CON LA CUAL LE AGRADECE POR FINALIZAR CON LA FACCION DE CÓRDOBA. DICE QUE HA IDO JUNTÁNDOSE CON EL MAYOR NÚMERO DE DIPUTADOS QUE HA PODIDO REUNIR, ENTRE ELLOS AL MARISCAL DE AYACUCHO ANTONIO JOSÉ DE SUCRE. LE REFIERE SU DESEO DE SEPARARSE DEL MANDO POLÍTICO, SIN DESPOJARSE DEL MANDO MILITAR, Y SU INTENSIÓN DE IR A VENEZUELA PARA ENTABLAR RELACIONES FRATERNALES CON EL GENERAL JOSÉ ANTONIO PÁEZ.

Popayán, 30 de noviembre de 1829.

Al Señor General Mariano Montilla.

Mi estimado general y amigo:

Por los sucesos de Antioquia hemos estado privados de la corres­pondencia de Vd. Pero hemos sabido con mucho gusto que vd. no se descuidó con Córdoba y ocurrió luego con prontitud.

Doy a Vd. las más justas gracias. Aún se asegura que vd. mismo vino a Mompox. En fin, todo acabó bien. Yo he venido bien del Sur, trayéndome o viniendo casi conmigo los Diputados más importantes. Sucre entre otros. Todo sigue bien. He mandado que sigan al Istmo varios cuerpos y por aquí han llegado muchos otros.

En este país (el más demagogo) se ha aplaudido mucho la “Cuarta Meditación Colombiana”. También ha gustado el proyecto de Consti­tución del Eco de Tequendama.

Esto prueba que la opinión ha mejo­rado; mejora admirable. Obando y sus amigos están ya con el Gobierno casi todos. Pasto lo mismo. De manera que el Congreso no debe quejarse del estado de las cosas.

No falta más que yo para completar la fiesta. Estoy cansado y fastidiado de las calumnias. Pienso retirarme del mando político, pero no del militar. Con esto, se gana y no se pierde. Otro magistrado, como sea bueno, será sostenido por mí, mis amigos y el ejército.

Será fuerte por las leyes y por nuestra autorización. Yo le prestaré toda mi influencia: influencia que no me puede prestar nadie. Yo me apoyo ahora de ellos (los generales), y después se apoyarán de mí; el gobier­no sobre todos. Páez no será más el coco de los niños. Yo iré a Vene­zuela y seremos camaradas. Mi gloria se salvará y Colombia también.

Ya ve vd. que no lo quiero dejar en los cuernos del Toro. Aviso mi conducta futura y prometo sostener a la Constitución y a los magistrados nuevos. Ningún hombre es preciso, decía Napoleón. La Francia es más dichosa ahora que con él.

El gobierno de Colombia no será odiado por los demás americanos. Todo irá bien. Y vd debe contar siempre con un amigo fiel.

BOLÍVAR.

El original fue donado al archivo del Libertador por el general Eleazar López Contreras, cuando ejercía la Presidencia de la República