Angostura, 13 de julio de 1818.
Al General J. B. Arismendi.
La llegada de S.E., el Almirante, a las Bocas del río con las armas y municiones, de que ya hay una gran parte en Pagayos, nos pone en disposición de armar nuestras divisiones y obrar activa y ofensivamente contra nuestros enemigos que, reducidos a cubrir las alturas y la costa, nos han dejado dueños absolutos de los Llanos Alto y Bajo, sin poder dar un paso en ellos, pues sólo tienen infantería, y ésta muy disminuida y atemorizada, y no se atreve a exponerse a los ataques de nuestra caballería.
Antes he participado a V.E. las noticias oficiales de nuestro diputado en Londres y sobre la venida de una fuerte expedición española con dirección a esa isla y de ella a la Costa Firme. Ahora añado que las últimas comunicaciones de aquél, de 18 de febrero de este año, confirman esta noticia, y está seguro de que vendrá como ha anunciado. En consecuencia de esta noticia, V. E. debe estar perfectamente preparado para que, si la expedición es tan fuerte que no se pueda calcular su destrucción, deje V.E., y todo el vecindario, esa isla y se vengan a la Costa Firme con dirección a Cariaco y otros puntos de las provincias de Cumaná, o Barcelona, donde obrará dentro de un mes un grande ejército. Menos sensible será dejar por algún corto tiempo esa isla que ver perecer a tantos bravos en una lucha absolutamente desproporcionada y desigual, mientras que incorporados con sus hermanos del continente es de toda seguridad la salvación de ésta y la retoma de aquélla. V. E., pues, en este caso evacuará completamente la isla.
Dios, etc.
[BOLÍVAR]
* De un copiador de Secretaría. Archivo del Libertador, vol. 103, fol. 13 v°. Escrito de letra de amanuense no identificado. Para las características del cuaderno copiador, véase la nota principal del documento n° 2852.