Cuzco, 23 de julio de 1825.
Al Señor Coronel Don Juan Pardo de Zela, nombrado Prefecto de Ayacucho.
De orden de S.E. incluyo a V.S. el anónimo, que de la ciudad de Ayacucho me ha sido dirigido a ésta del Cuzco.
S.E. quiere que, enterado V.S. del pormenor de su contenido; proceda a hacer una pesquisa secreta sobre cada uno de los hechos a que el anónimo se refiere, y que el expediente original sea dirigido al Consejo de Gobierno para que la Corte Superior de Justicia haga efectiva, conforme a la ley, cualquiera responsabilidad que resulte contra el coronel Estomba. Asimismo dará V.S. cuenta a esta secretaría principal del resultado de cuanto queda ordenado, conforme a las disposiciones anteriores de S.E., que ha tenido la honra de comunicar a V.S.
También dispone S.E. que don Luciano Cano y don Juan Zapatín sean expulsados del país, reservándose S.E. ordenar lo mismo contra las personas que se indican en el anónimo, luego que sea informado del resultado de la pesquisa, y de lo demás que V.S. exponga a efecto de purgar el país de hombres díscolos y perturbadores de la tranquilidad pública. En nada, tanto como en esto; deben celar los primeros magistrados de la República, pues que a más de ser un deber de todo ciudadano, lo es en particular de los que están puestos a la cabeza de los primeros destinos.
Con esta misma fecha se ordena al señor coronel Estomba que haga marchar inmediatamente al Ejército Unido, a los tenientes coroneles don Buenaventura Alegre y don Eugenio Garzón. Mas, si a la llegada de V.S. permanecen aún en esa ciudad, dispondrá V.S. que salgan inmediatamente de ella con dirección al ejército.
Soy, etc.
[FELIPE S. ESTENÓS]
* De un copiador de Secretaría. Archivo del Libertador, Sección O’Leary, tomo 39, folio 59 recto y Vto.