Quinta Fundación [1], 26 de julio de 1821.
Al Vicepresidente de Venezuela.
Contesto los siete oficios que he recibido de V.E. desde el número 116 hasta el 122, fechas de 21 y 22 del corriente. S.E. el Libertador Presidente queda enterado de ellos, y me manda comunique a V.E. las resoluciones siguientes: 1° Que es conforme a las intenciones de S.E. y a los intereses de la República, la inteligencia que V.E. ha dado a mi orden de 26 de mayo último en que le transmitía la disposición de que se entendiese directamente con los Ministros respectivos para obtener las resoluciones de S.E. el Vicepresidente de la República, continuando sólo sus relaciones con el Ministerio a mi cargo en los negocios de guerra o de íntima conexión con este ramo. 2° Que se repite la instancia sobre el papel de oficio porque se ha acabado el poco que tenía la Secretaría. 3° Que la orden comunicada por el Estado Mayor General relativamente al equipo del Batallón Carabobo debe cumplirse. No solamente se ha de vestir y equipar aquel cuerpo, sino que también debe recibir su paga íntegra, sin hacerle deducción ninguna de vestuario, calzado ni lavado. Así los oficiales como la tropa se mantendrán con su paga; pero será peculiar a los Jefes naturales del cuerpo el arreglo del rancho, y modo de proveerse el batallón. 4º Que la propuesta de Mr. Bourke es inadmisible porque además de ser muy gravosas las condiciones que impone para el pago, nos obliga a tomar armas, y otros elementos que no necesitamos por el momento. Si S.E. puede contratar los 1.000 fusiles sólo a pagarlos al contado en dinero efectivo o en frutos al precio corriente sin privilegio particular, podrá hacerlo, sin perjuicio de que se soliciten por otras partes los tres o cuatro mil fusiles que necesitamos. 5º Que al Señor General Guerrero obtuvo en efecto comisión para proveer de ganados al ejército, por todos los medios posibles; pero no se le autorizó para tirar libramiento contra las cajas, porque nunca fue la intención de S.E. pagar los ganados que se tomasen sino en la misma especie. No debe pues, V.E., mandar pagar ninguno porque además de aquella razón, hay la muy poderosa de que no habiendo aviso previo del Señor General Guerrero, ni apareciendo más que un simple billete, sería muy fácil sorprender con muchos que fuesen falsos. 6º Que se aprueba la licencia, y pasaporte concedido por V.E. al Subteniente español Villalonga, pasado en La Guaira, y se tendrán presentes las consideraciones que V.E. trae para probar la necesidad de juramentar los oficiales y tropa prisioneros que han tomado servicio en nuestras banderas. 7º Que se aprueba igualmente la organización que ha dado V.E. al batallón Orinoco en 8 compañías, y la distribución y colocación que se ha hecho de ellas. Por el momento no sabe S.E. de dónde pueda sacar las plazas veteranas, que V.E. pide para la instrucción de las compañías sueltas que se están formando. S.E. no se resuelve a desmembrar los batallones del ejército en aquellas clases, ni sabe que haya cansados, o inútiles que puedan destinarse a este servicio. Si hubiere algunos en los hospitales, se destinarán. 8º Que en los Valles de Aragua le han mandado formar compañías sueltas, una en cada pueblo, y están todas al mando de los Comandantes Generales, que están encargados de su organización y disciplina. Lo comunico, &. Dios guarde, &., &.
PEDRO BRICEÑO MÉNDEZ
* Archivo del Libertador. O’L Vol. XVIII, 2º, f° 69 vto. al 70 y vto.
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